lunes, 30 de octubre de 2017

Dowell doma a los tigres

2017 está siendo el gran año de las selecciones inferiores inglesas, campeones del Mundo Sub’20 y Sub’17, y de Europa Sub’19 con Brereton en sus filas. El sábado un integrante de la selección Sub’20 campeona del Mundo fue el gran protagonista del Hull City-Nottingham Forest, el centrocampista Kieran Dowell que está cedido hasta final de temporada por el Everton se despachó con un hat trick decisivo para el triunfo del Forest en el KCOM Stadium. Dowell ya estaba haciendo una buena campaña en el Forest, mostrando mucha calidad y clase, pero en Hull se graduó con matricula de honor.

El Forest se presentaba con las bajas de los dos únicos laterales izquierdos de la plantilla Traore y Fox, por lo que Lichaj pasó al lateral izquierdo y Darikwa ocupó el derecho. Worrall fue el central con Mancienne. En la delantera fue baja el goleador Murphy siendo Cummings quién jugó más adelantado.

La exhibición de Dowell comenzó al filo de la media hora, recibió un balón en el centro del campo, fue avanzando sin demasiada oposición y soltó un latigazo que hizo imposible la estirada de McGregor. Pudo irse al descanso el Forest con dos goles a favor, en el tramo final de la primera mitad Osborn estrellaba un remate de volea en el larguero tras un buen centro de Lichaj.

El Hull salió fuerte tras la reanudación, Smith tuvo que intervenir a un disparo potente de Campbell y un cabezazo de Hector fue salvado por Cummings en la misma línea. Por suerte el Forest logro el 0-2 poco después, un centro de Walker fue controlado por McKay que cedió a Dowell que remató de primeras con un buen disparo ajustado al poste. El segundo de la tarde del joven jugón. Pero como el Forest no puede vivir nunca tranquilo, solo cinco minutos después Bowen se sacaba un magistral zurdazo que se colaba por la misma escuadra de Smith, golazo. En el 84 Dowell completaba su Hat trick gracias a un penalti cometido sobre Walker, Dowell no se puso nervioso y engaño en el lanzamiento a McGregor. Casi sin tiempo para el final el Hull hizo el 2-3 tras un saque de banda a la hoya mal defendido por el Forest, se formó un barullo en el área y Hector batía a Smith. Aún pudo Dowell hacer un cuarto gol pero su disparo fue despejado por las piernas del portero local.

Además del espectacular partido de Dowell, que domó a lo tigres mejor que Ángel Cristo en sus mejores tiempos. El equipo en general hizo un buen partido, recuperando sensaciones del esperanzador inicio de temporada. Warburton tiene una idea clara de juego, apostando por el juego combinativo y por los jugadores de calidad, si el equipo logra una mayor solidez defensiva puede ser una temporada para que la afición vuelva a disfrutar con el juego del Forest.

El Forest tras esta victoria es 11º en la tabla con 21 puntos en 14 jornadas, pero está a solo dos puntos de los puestos de play-off. Curiosamente el Forest esta campaña no sabe lo que es empatar, ha ganado siete partidos y ha perdido otros siete. Mañana martes tova visitar la siempre complicada casa del Reading aunque no ha empezado demasiado bien esta temporada.

Forest: Smith; Darikwa, Worrall, Mancienne (c), Lichaj; Bridcutt, Vaughan (Bouchalakis 70’); McKay (Ward 80’), Dowell, Osborn; Cummings (Walker 70’)
Subs not used: Henderson, Mills, Clough, Brereton
Goals: Dowell 29’, 71’, 84’ (pen)
Bookings: Vaughan 24’, Ward 86’, Walker 90’
Hull: McGregor; Aina, Dawson (c), Hector, Clark; Meyler, Larsson; Bowen, Henriksen (Toral 46’ (Dicko 54’)), Grosicki (Irvine 46’); Campbell 
Subs not used: Marshall, Diomande, Tomori, Stewart 
Goals: Bowen 76’, Hector 88’
Bookings: Larsson 61’, Irvine 64’, Dawson 68’, Clark 74’
Referee: Jeremy Simpson

Attendance: 15,780 (1,279 away)

lunes, 23 de octubre de 2017

Una victoria balsámica

El Nottingham Forest derrotó al Burton Albion (2-0) en el partido de Championship que ambos disputaron en un ventoso City Ground el sábado. Los goles de Barry McKay y Eric Lichaj en la segunda parte sellaron una victoria balsámica para el Forest ante un Burton que resistió con una defensa organizada pero acabó cayendo ante la calidad y el ritmo rápido de juego de los locales.

No se auguraba una tarde fácil para los dobles campeones de Europa. El Forest siempre parece tener problemas contra los equipos entrenados por Nigel Clough. Además, la derrota en Derby sembró demasiadas dudas entre la afición. Dudas un tanto injustas porque el juego del equipo ante los carneros no fue malo, pero una derrota en el duelo local siempre duele más. Por si fuera poco, el día amaneció desagradable. Viento, lluvia y frío a orillas del Trent. Sobre todo viento, racheado y fuerte que descontrolaba el balón a cada pase o a cada disparo. Una tarde oscura se cernía sobre City Ground como cuando las fuerzas de Voldemort atacaron Hogwarts para hacerse con el poder en el mundo mágico.

Contra tanto pesimismo en un día gris y plomizo, el Forest recibió sin embargo la mejor noticia que a día de hoy puede llegarle: la titularidad de David Vaughan. Con el galés sobre el campo el Forest se transforma. Es otro equipo capaz de manejar mejor el balón y de encontrar los pases verticales entre líneas que tanto se le atragantan, pero que tanto reclama Mark Warburton para sacar el balón jugado desde la defensa.

Así pues, con Vaughan por fin de vuelta, no es sorpresa que el Forest consiguiera imponerse a su rival. Le costó bastante, hay que reconocerlo. En la primera parte la defensa del Burton con nueve hombres por detrás del balón tejió una tela de araña de la que no supieron salir los locales. Tras un inicio trepidante, el partido languideció y la afición comenzó a impacientarse ante el ritmo lento de ambos equipos. El juego estaba donde querían los visitantes. El Forest, con poca verticalidad, se exponía a los robos de balón de Scannel y de Akins, al que Mancienne a duras penas pudo controlar durante todo el partido.

La mejor ocasión de la primera parte fue para los visitantes. Una buena combinación por la banda acabó con un pase al corazón del área que remató Dyer totalmente solo. Por suerte para el Forest, Eric Lichaj se tiró a la desesperada, casi usando su espectro patronum, y evitó el gol en el último momento. Alivio para los 25.000 seguidores que poblaron una semana más las gradas del mítico City Ground, entre los que por cierto se encontraba una nota global de color. Un grupo de 32 jóvenes estudiantes chinos, coreanos e indios asistieron al partido para presenciar el verdadero fútbol inglés, no ése que vende la Premier League. Y es que, aunque les duela a muchos, el Forest es global, como Harry Potter.

La primera parte no hizo mucho por entretener a los visitantes asiáticos, alguno de los cuales confesó haberse quedado medio dormido durante esos 45 minutos de fútbol rocoso, ventoso y no excesivamente brillante.

Pero todo cambió tras el descanso. En el vestuario Mark Warburton pidió a los suyos que aumentasen el ritmo del partido. Que tuvieran confianza en sí mismos, en su calidad y en la de sus compañeros. La clave, reconoció tras el partido, era atreverse a jugar más rápido, más vertical y sin dar opciones al Burton de asentarse.

Y el equipo respondió a su comandante en jefe como el ejército de Dumbledore lo dio todo por defender el mundo mágico ante las fuerzas oscuras. No cabe duda de que, por el momento, esta plantilla está con su entrenador. Y creen en su manera de ver el fútbol. Otra cosa es que luego salga bien sobre el césped, pero lo intentan. La segunda parte fue una clara demostración. El equipo, transformado tras el descanso, aumento el ritmo de su juego, adelantó líneas y, sobre todo, se atrevió a romper la madeja del Burton.

Así llegó el primer gol. Un centro al área que no consiguió despejar Bywater y cayó a los pies del escocés McKay para mandarlo a la escuadra. Un toque sutil y de calidad que dio al Forest la ventaja en el marcador que merecía. Ya con esta tranquilidad entraron en el campo Dowell y Bouchalakis para apuntalar el partido. Mientras que el griego le dio al Forest la solidez que necesitaba en los minutos finales, el joven cedido por el Everton volvió a demostrar que es un excelente jugador. Tras unos partidos un poco más grises, Dowell volvió a su mejor versión, combinando pases con Murphy, Osborn o McKay. En una de esas jugadas trenzadas llegó el segundo tanto del Forest. Un golazo muestra de lo que puede llegar a hacer este equipo. A un toque, por la derecha, combinaron Murphy, Dowell y McKay. El escocés remató la obra de arte con un taconazo para Lichaj, que se incorporaba como una bala por su banda. El americano pisó el área, regateó a dos rivales y remató con mucha calma con su pie izquierdo. Un magnífico gol que remató con una celebración alocada, dando una vuelta de honor al estadio para dedicárselo a todos los aficionados. Lichaj personifica el afán de lucha y superación de este Forest que ha pasado momentos difíciles pero lo da todo por salir del agujero.


Por una vez el Forest consiguió llegar al final del partido sin pasar apuros. Algo que casi ni se recuerda a orillas del Trent. Fue tan solo el segundo partido con la puerta a cero en casa esta temporada. Una victoria necesaria y que servirá para calmar los nervios, un tanto injustificados, de muchos. Queda trabajo por hacer, pero todo indica que el equipo marcha en la dirección adecuada.

lunes, 16 de octubre de 2017

El Derby se lleva el primer asalto

El primer East Midlands derby de la temporada fue para los carneros que se impusieron por 2-0 al Nottingham Forest en Pride Park, un partido marcado por el tempranero gol de los locales y por las oportunidades desaprovechadas por los visitantes sobre todo en la primera mitad.

Las principales novedades en el Forest fueron la presencia en el once inicial de Lichaj que era su primera titularidad y de Barrie McKay, el escocés dispuso de las mejores oportunidades del Forest durante el partido. La defensa era bastante inédita con Lichaj y Traore en los laterales, y  una pareja de centrales formada por Fox y Mancienne que no ofrecía demasiada confianza antes del inicio del encuentro. El Forest tiene un serio problema en la defensa.

Y nada más comenzar el partido llegó el primer gol local obra como no podía ser de otra manera del delantero checo Matej Vydra que hace tiempo se ha convertido en una bestia negra para el Forest, el de ayer era el octavo gol que le hacia a los dobles campeones de Europa. A los 24 segundos de juego Vydra soltaba un buen disparo desde fuera del área que batía a Smith, imposible comenzar peor. Pero el Forest no acuso en exceso ese gol y realizó una muy buena primera mitad, gozando de suficientes ocasiones para empatar antes del descanso. Primero McKay estrellaba un disparo en el palo y después el propio mediapunta escocés se plantaba solo ante Carson pero el portero desviaba con la pierna su disparo, esta fue la más clara.

Al comienzo de la segunda mitad siguió apretando el Forest y Cummings pudo empatar pero su remate a centro de Osborn salió por encima del larguero. Por desgracia en el minuto 50 Nugent no perdonaba con su remate tras una rápida jugada de Vydra. Mazazo para un Forest que no merecía perder por 2-0. Antes de ser sustituido McKay volvió a probar fortuna pero su disparo fue desviado a córner por Carson. A la hora de juego Clough y Ward entraron en lugar de Dowell y McKay, y en el 75’ Walker sustituía a Cummings. No mejoró el Forest con los cambios, y los últimos acercamientos con peligro fueron para el Derby con dos lanzamientos de faltas ambas lanzadas por Lawrence, en la primera Smith hizo una buena intervención y en la segunda que era una falta más lateral se estrelló en el larguero.

Siempre es doloroso perder contra el gran rival, ahora toca recuperarse y pensar en el partido del sábado ante el Burton Albion. Una victoria dejaría el Forest en una buena posición y no lejos del play-off. Ahora mismo es 13º con 15 puntos.

Forest: Smith; Lichaj, Mancienne (c), Fox, Traore; Bridcutt, Dowell (Clough 60’); Cummings (Walker 74’), Osborn, McKay (Ward 60’); Murphy
Subs not used: Henderson, Darikwa, Bouchalakis, Worrall
Booking: Fox 67’
Derby: Carson; Wisdom, Keogh (c), Davies, Forsyth; Huddlestone, Ledley; Russell, Vydra (Thorne 70’), Lawrence; Nugent (Martin 80’)
Subs not used: Mitchell, Baird, Pearce, Winnall, Weimann
Goals: Vydra 1’, Nugent 50’
Referee: Andrew Madley

Attendance: 31,196 (3,145 away)

martes, 3 de octubre de 2017

Vuelve la tranquilidad a Nottingham

El Nottingham Forest derrotó al Sheffield United (2-1) en el partido de Championship que ambos jugaron en City Ground el sábado. Lo goles de Cummings y Dowell para el Forest dieron la vuelta al tempranero tanto de Lundstram para los visitantes.

Y es que, fiel a la tradición de las últimas jornadas, el Forest comenzó disparándose en el pie a poco del pitido inicial. No habían pasado más de tres minutos desde el comienzo del partido cuando Jordan Smith ya estaba recogiendo el balón del fondo de su portería. Y lo peor no era el gol en sí, que añadía aún más presión al equipo en una semana de muchos nervios. Más allá del tanto encajado, el problema fue la sensación de impotencia del Forest durante esos tres minutos iniciales. El Sheffield United hizo muy bien los deberes y, con la lección aprendida, se dispuso a presionar arriba con vigor hasta asfixiar a los jugadores locales, que fueron incapaces de pisar el campo rival hasta que sacaron de centro, por segunda vez, tras el gol.

Los visitantes intentaron repetir en City Ground lo que ya hiciese hace unas semanas el Leeds. Líneas adelantadas, presión alta y muchos jugadores cerca del área del Forest para evitar que saque el balón jugado y, a ser posible, aprovechar los errores en el pase. Por suerte, a este sorprenderte Sheffield United, un recién ascendido que llegó a Nottingham en posición de ascenso directo, le falta la calidad que tiene la plantilla del Leeds. Su toque en ataque era mucho más impreciso y, sobre todo, se partió con más facilidad. No supo mantener las líneas tan juntas como debiera, y eso facilitó la remontada local.

En una demostración de carácter, la joven plantilla del Forest no se vino abajo a pesar del mal comienzo. No es nuevo; este grupo de jugadores tiene espíritu de lucha y cree en su patrón de juego. Eso lo hemos visto ya en varios partidos. El empate vino de la mano de Jason Cummings, quien se aprovechó de un mal despeje de la defensa rival en un saque de esquina y remató con fuerza fuera del alcance de Blackman. Sólo habían pasado seis minutos desde el gol encajado y el empate tranquilizó tanto a la grada como al equipo.

Lo que siguió, en la primera parte, fue de nuevo una muestra de que Mark Warburton va por el buen camino. El Forest dominó. Quizás no jugó tan bien como lo hizo contra el Fulham, pero sí con más control y efectividad. Resistió bien en defensa una vez que el experimento de jugar con tres centrales dio paso a una zaga más clásica de cuatro. Parapetado en un 4-4-2 y con Ben Osborn moviendo con energía al equipo, el Forest atacó bien por las bandas, sobre todo la izquierda en la que Traoré le ganó la partida al americano cedido por el Totenham Carter-Vickers. Merced a ese juego por las bandas, llegó el gol de la victoria. Una apertura a la derecha, un cambio de juego a la banda contraria y allí Traoré devolvió el balón al corazón del área para que el joven Dowell rematase la remontada del Forest. Fue un gol de equipo, y una muestra de lo que, con paciencia, esta plantilla puede llegar a dar de sí.

Contra todo pronóstico, el Forest consiguió defender con entereza y aguantar el resultado. No es muy normal ver al equipo sólido en la zaga, pero ante el Sheffield United, aunque reculó hacia atrás demasiado, supo mantener la tranquilidad. El trabajo de Bridcutt, barriendo todos los errores que se dejaban los centrales, fue encomiable. El único problema es que Bridcutt sale a una amonestación por partido porque tiene que frenar demasiada veces a los rivales en falta. Se perderá más de un partido por sanción a no ser que el equipo mejore el entramado defensivo.

Con esta victoria el Forest recupera algo de tranquilidad y el equipo gana tiempo para seguir trabajando. La racha de malos resultados estaba empezando a desatar el nerviosismo y el pesimismo entre los seguidores, como cuando Dolores Umbridge se hizo cargo de la Defensa de las Artes Oscuras en Hogwarts. Este extremismo y falta de paciencia es lo que ha llevado al Forest a la situación en la que se encontró la temporada pasada y no debe repetirse. Aunque aún queda mucho trabajo, el equipo de Warburton este año ha mejorado de manera clara. El fútbol es mucho mejor y los resultados tienen que llegar. Y qué mejor para que lleguen que tras el parón internacional de selecciones, cuando el Forest viajará a Derby a enfrentarse a un equipo que lleva una cabra en el escudo.